Guía básica para iniciar con alimentos sólidos para tu bebé

La crianza de los recién nacidos puede ser un reto incluso para los padres que no son primerizos, por eso cada día trae un aprendizaje diferente que les permite, como familia, vivir y conocer cosas nuevas como, por ejemplo, incluir los alimentos sólidos para tu bebé.

Cada etapa trae nuevos desafíos que pueden generar mu dudas en todos los aspectos, pero acá te vamos a despejar las duda que tengas para que puedas afrontar tu rutina con las herramientas correctas. 

¿Tu bebé ya cumplió los seis meses de vida? Pues una vez llega este momento, vienen nuevas rutinas, cambios y experiencias tanto para ti como para el pequeño. La alimentación complementaria es una de las más importantes en esta etapa.

Si bien has mantenido la lactancia exclusiva es momento de iniciar con la introducción de alimentos sólidos, dado que esto les va a permitir conocer nuevos sabores y adaptarse mejor a las comidas que vas a empezar a darles. Esta transición puede ser complicada para los bebés ¡no te rindas tan rápido!

¿Qué son los alimentos sólidos para tu bebé?

Los alimentos sólidos para tu bebé son diferentes a leche materna que le has dado hasta ahora, por lo general esta introducción a partir de los 6 meses de edad, o dependiendo de las recomendaciones de tu médico pediatra. Recuerda seguir sus controles y hallar el mejor momento para cada etapa. 

Es importante que sepas que la leche materna sigue siendo su principal fuente de nutrición, sin embargo, debes de empezar a estimularlo a otro tipo de texturas y nutrientes con los alimentos sólidos adicionales que le darás.

Esta etapa es clave, porque en los primeros dos años de vida se forman hábitos alimenticios sanos y equilibrados. Se debe iniciar con alimentos tipo papillas o purés, posteriormente se cambia a preparaciones picadas, luego trozos menos finos y finalmente alimentos sólidos.

¿Qué alimentos sólidos debes darle a tu bebé?

La recomendación es que estos primeros alimentos sean texturas suaves que le permitan una fácil digestión, teniendo en cuenta que es una etapa donde sus dientes empiezan a salir.

Puedes iniciar dándole un mismo alimento durante uno a tres días seguidos para determinar si lo acepta o presenta algún rechazo o alergia. Si el bebé tolera bien la comida que le diste, puedes darle otro nuevo y así sucesivamente. Los alimentos previos que ya habías introducido se pueden seguir combinando con los nuevos.

Es posible que algunas texturas o sabores no sean de su agrado, por lo que no desistas de inmediato, te aconsejamos que se lo ofrezcas entre 9-15 veces antes de determinar que realmente no fue de su agrado.

A continuación, te damos algunas alternativas de alimentos sólidos para tu bebé:

• Carnes y verduras en puré, esta textura es suave y fácil de deglutir por el bebé. 
• Huevo
• Frutas en compotas son una gran forma de comenzar porque su textura es muy suave y fácil de deglutir por el bebé.
• Cereales como arroz, maíz, trigo, avena, cebada y derivados de estos cereales como arepa, pan y pasta. 
• Granos (fríjoles, lentejas y garbanzos)
• Tubérculos como papa, yuca, arracacha y ñame
• Plátano (verde, colí o guineo, maduro) 
   

Tips para iniciar la transición con alimentos sólidos 

• Los procesadores de alimentos, licuadoras o machacadores serán tu mejor aliado a la hora de preparar las papillas de tu bebé, te facilitarán las cosas.
• Las cucharas pequeñas de plástico con bordes redondos son suaves para la boca y las encías delicadas de tu bebé. 
• Los baberos de plástico de limpieza fácil pueden ser útiles para reducir los cambios de ropa del bebé, y los de tela serán prácticos para limpiar los restos de comida que quedan en su boquita.
• Las bolsas reutilizables de silicona son maravillosas cuando tienes que salir. Te permiten llevar las papillas caseras y cárgalas en la maleta de tu bebé.
• Ofrece un alimento nuevo a la vez durante uno a tres días. Llevar una bitácora en donde apuntes lo que come durante las primeras semanas, te ayudará a detectar posibles alergias alimenticias.
• Se recomienda no incluir sal ni azúcar en las preparaciones.
• Lo ideal es comer cuando tu bebé come, con el paso del tiempo aprenderá a usar los cubiertos por imitación, adquirirá habilidades sociales y reforzará los lazos familiares.
• Un horario de alimentación pegado en la puerta del refrigerador para monitorear lo que tu bebé ha probado y qué tan a menudo. 
• Cocina los mismos ingredientes de formas distintas para ver cuál le gusta más.
• No lo obligues a comer o terminarse las porciones. Estas acciones podrían afectar su relación con la comida.
   

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Cada etapa es un momento mágico para aprender junto a ellos cosas nuevas, por eso entender sus necesidades es clave en la inclusión de alimentos sólidos para tu bebé sea fácil y divertido. En Baby & Me te contaremos todo lo que necesitas saber y conocer para la crianza.